Misión, Valores y Principios
En La Solana por iniciativa de un grupo de personas con miras a apoyar los derechos de las personas con discapacidad intelectual, en 1983 se creó la Asociación Comarcal Pro-minusválidos, constituyéndose y definiéndose como una Entidad privada sin ánimo de lucro, independiente y con personalidad jurídica propia, actualmente llamada Asociación Comarcal Pro-Capacidad, que se dedica desde sus inicios a mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual y la de sus familias. Esta Asociación funcionó con subvenciones hasta que en 1992 se consiguió firmar el convenio de financiación vigente entre la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de La Solana, y este a su vez con esta Asociación. En un principio dicha financiación fue para el mantenimiento del Centro Ocupacional. A partir de ahí se fueron constituyendo otros servicios de apoyo a personas adultas con discapacidad intelectual a través de diferentes programas.
También independientemente de los Convenios de Mantenimiento para la financiación de estos servicios, se creó un Centro Especial de Empleo con actividades de limpieza de interiores, mantenimiento de zonas verdes, limpieza de exteriores y servicios a la comunidad, conserjería y acompañamiento de autocar, en el que trabajan 12 personas con discapacidad, 10 con discapacidad intelectual y 2 con discapacidad física que hacen de jefes de equipo.
Nuestra misión
“Contribuir, desde un compromiso ético, con apoyos y oportunidades, a que cada persona con discapacidad intelectual y su familia puedan desarrollar su proyecto de calidad de vida, así como a promover su inclusión como ciudadana de pleno derecho en una sociedad justa y solidaria”.
Y queremos…
Ofrecer apoyos de la máxima calidad, para que las personas con discapacidad intelectual tengan una vida rica y plena de oportunidades.
Planes
“Materializar los apoyos a las personas con discapacidad intelectual y a sus
familias, de acuerdo con el proceso de tres funciones del modelo teórico de la Asociación Americana de Retraso Mental 2002”.
“Promover acciones y servicios, creando las condiciones para que se materialice adecuadamente la misión.”
“Asegurar que cada una de las personas atendidas en los diferentes servicios de nuestra entidad disponga de un proceso de planificación centrada en la persona como apoyo para diseñar su futuro y para alcanzar, a lo largo del tiempo, los resultados personales que ella misma defina”.
Los valores de nuestra entidad responden a una visión compartida del mundo, de las personas con discapacidad intelectual y de la relación de éstas con ese mundo que las rodea.
Premisas en las que basamos nuestras actuaciones:
- LA DISCAPACIDAD INTELECTUAL
ES: NO ES:
Dinámica Una enfermedad
Ecológica Una característica exclusiva del
Un reto individuo
- LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL
TIENEN: NECESITAN:
Los mismos derechos. Relaciones personales.
Una evolución. Apoyos que hagan posible su autonomía
Un papel activo en la Apoyos individuales.
sociedad. Inclusión
- SUS FAMILIAS
SON: NECESITAN:
La base de la integración. Ser una familia más.
El principal recurso. Recibir apoyos Específicos.
El apoyo de otras familias.
Principios
Ofrecer experiencias en la persona que incluyan:
– Presencia comunitaria (incrementar su presencia en la vida de la comunidad local)
– Participación comunitaria (aumentar y profundizar sus relaciones)
– Respeto. Estimular roles valorados (aumentar su reputación y el número de sus contribuciones)
– Competencia (Apoyar contribuciones)
– Promover elecciones (tener más control y elección en sus vidas)
Las intervenciones que se realicen desde cada uno de nuestros servicios, dirigidas a personas con discapacidad intelectual, deberán ser:
– Dirigidas a la persona
– Elaboradas sobre las capacidades
– Centradas en la persona
– Estableciendo una red
– Basadas en resultados personales
– Responsabilidad colectiva
Para ello es necesario un compromiso de toda la organización, que debe proporcionar las condiciones necesarias para que cada persona pueda ser la protagonista de su vida y diseñar su futuro, además de poner los medios precisos para que las cosas que son deseables para cada persona sucedan de verdad.
Todas las personas con discapacidad intelectual, independientemente de sus necesidades de apoyo, deben tener derecho a tener más control sobre sus vidas y a diseñar futuros deseables y positivos, contando con los apoyos necesarios que les ayuden a alcanzarlos
Este es un esfuerzo común con el único objetivo de que las personas con discapacidad intelectual puedan alcanzar una vida que merezca la pena ser vivida.